Tuesday, March 28, 2006

Cuando Irlanda era un Imperio

Cuando Irlanda era un Imperio

En 707 páginas, Thomas Charles-Edwards – Profesor de Celta en la University of Oxford, autor de Bechbretha (1983, con Fergus Kelly), The welsh Laws (1989) y Early Irish and Welsh Kinship (1993) nos ofrece una muy bien documentada historia de Irlanda y los irlandeses entre los siglos IV y IX de nuestra era, es decir, desde San Patricio hasta los Vikingos.
Early Christian Ireland, ISBN 0-521- 36395-0, Hardback, Cambridge University Press, 2000, comienza con las incursions y los asentamientos colonizadores irlandeses en Bretaña y la conversión de Irlanda al cristianismo, es decir, cuando Irlanda era un imperio.
En las páginas 216 y siguientes, el autor nos relata la historia de San Patricio.
Hijo de un diácono, Calpornius , el hijo de un sacerdote, Potitus. Su familia pertenecía a la nobleza de una civitas romano-britona. Cuando tenía cerca de 16 años fue capturado por irlandeses cazadores de esclavos y sometido, junto a otros, a la esclavitud durante seis años bajo un mismo propietario. Ese tiempo hizo de un no creyente (como él mismo se describe en escritos posteriores), un hombre cuya vida estaba dominada por la fe, que no llegó repentinamente sino lentamente, cambiando su actitud durante la esclavitud.
Cuando recupera su libertad emprende un fatigoso camino hacia la tierra prometida de sus padres y así, comprobamos que Irlanda también invadía con la fe, a la Bretaña que varios suelen señalar como impiadosos explotadores de la Isla Esmeralda.
Tanto Escocia, como Inglaterra, como Gales padecieron esas “invasiones” del frustrado Imperialismo Verde que no perduró.
Pero si analizamos la cantidad de descendientes de irlandeses que hay regados por toda América y la influencia que en ella tienen no es muy desatinado hablar de un “Atlántico Verde”.
Charles-Edwards nos advierte en la Introducción, p. 1:
“Esta es, en primer lugar una historia del pueblo irlandés, y no exactamente de los habitantes de Irlanda. Qué hicieron los irlandeses en Bretaña, Francia e Italia es su preocupación, más que aquello que ellos hicieron en su hogar”.
Debemos destacar los 14 mapas que embellecen este volumen de la Cambridge University Press: The Kingdoms of the southern Uí Nelly, Brega, Mide and Tethbae, Peoples and kingdoms of Connaught, Sites in Connaught, The north-west, The nort-east, Three zones of Roman influence in Ireland, Leinster peoples and kingdoms, Sites in Leinster, The Irish in Britain, The northern frontier of Leinster, Munster peoples and kingdoms, Sites in Munster.
Particularmente interesante es el texto que a partir de la página 326 despliega el autor para referirse al “arte insular”:
“El arte insular es gobernado en parte por el movimiento de hombres y de objetos, por ejemplo, libros y en parte por la transferencia de motivos decorativos de un medio a otro, de trabajos en metal a la iluminación de libros y de los libros a esculturas en metal y en madera. Algunos objetos fueron escasamente movidos pero otros anduvieron largos recorridos. El Libro de Salmos de Bangor fue escrito en el monasterio de Bangor, cerca de Belfast, a finales del siglo VII pero fue encontrado en Bobbio en los Apeninos, en un monasterio fundado por el irlandés Columbanus quien fuera monje en Bangor. Muchos maestros irlandeses encontraron empleo en el Imperio Carolingio”.
Una detallada geografía del arte nos permitiría comprobar hasta que punto el título de nuestra nota sobre este fabuloso libro es correcta: Irlanda es un muchos aspectos una forma sutil del imperialismo y muchos de los irlandeses exiliados en otras tierras fueron sus agentes directos e, indirectamente, soldados implacables del Imperio Británico que crearon Isabel I y James VI (I).

Guillermo Compte Cathcart

Panfletos y Panfleteros en la naciente Gran Bretaña Moderna

Panfletos y Panfleteros en la naciente Gran Bretaña Moderna
Joad Raymond, Lector en Literatura Inglesa en la University of East Anglia ha escrito un muy interesante y develador libro publicado por la Cambridge University Press: Pamphlets and Pamphleteering in Early Modern Britain, ISBN 0-52181901-6, 2003.
Es este un libro profusamente ilustrado, de 403 páginas, tapa dura y en él se nos relata como a mediados del siglo dieciséis los textos jugaron un rol marginal en la propaganda y en los esfuerzos por influenciar al público y como al final del siglo diecisiete era evidente cualquier intento por obtener el apoyo a una iniciativa política, adhesión partidaria o posición religiosa o cultural o empresaria, debía explotar el poder persuasivo de la prensa.
El más efectivo medio de persuasión y comunicación fue el panfleto, que creó una influyente comunidad de lectores que ejercían una presión moral y política y así conformaron una esfera pública de opinión popular y política.
La evolución del panfleto y sus distintas definiciones; el uso por los distintos grupos sociales, políticos y religiosos de este instrumento al servicio del poder obtenido o por obtener es desplegado en capítulos con títulos tan sugestivos como: Prologue: Changing experiences 1588, 1642, 1688; What is a Pamphlet?; “How loudely they cry”: Marprelate, purity and paper bullets; “Stitchers, Blinders, Stationers, Hawkers”: printing practices and the book trade; “A mongrel race of Mercuries lately sprung up”: the business of news, c.1580-1660; “From words to blowes”: Scottish origins of the explosion of print, 1637-42; “This bookish partial formall fierce factious animositous age”: printing revolutions, 1641-60; “Speaking abroad”: gender, female authorship and pamphleteering; “A Bog of Plots, Sham-plots, Subornations and Perjuries”: pamphlets and polemic in the Restoration, y el Epilogue en el cual el autor nos dice:
“En 1794 George Chalmers en su Life of Thomas Ruddiman , ofrece la primera historia seria de la prensa en Gran Bretaña, muchos lo siguieron. Ninguno trató de escribir una historia comprehensiva del panfleto después del noble y peculiar A Critical History of Pamphlets de Myles Davies en 1715. Después de todo, qué es un panfleto? Todas sus características de anonimato, autoreferencia, motivos inconfesables, delirios ecuménicos, motivos no comprobados, injurias, calumnias, suposiciones infundadas, pretensiones descomunales lo hacen un género indeseable y no reproducible...su fortuna creció y se derrumbó y el panfleto no volverá a tener el dinamismo intelectual y la energía verbal que caracterizó el nacimiento de la Gran Bretaña Moderna”.
Cuando en un barrio perdido del Gran Buenos Aires, un grupo de muchachos deciden formar una nueva entidad deportiva y son acosados por los clubes de fútbol más viejos – temerosos de perder sus pocos socios amarrados por el cansancio de sus años – a alguno de esos nuevos combatientes por el Bien Común se le va a ocurrir una idea antigua pero renovada en cada generación: Escribir un panfleto.
Esa copia mal reproducida, impresentable para los parámetros de la prensa escrita actual, irá de mano en mano y tal vez, si la suerte acompaña, se sumarán otros a la idea original.
Cuando la nueva organización social haya nacido y luche por la consolidación en este mundo global, nadie recordará a ese panfleto.
Este libro de la Cambridge University Press es un refresco para las memorias dormidas, un justo homenaje al viejo, querido y nunca reconocido panfleto.
Guillermo Compte Cathcart

¿El Capital al servicio de la Economía o la Economía al servicio del Capital?

¿El Capital al servicio de la Economía o la Economía al servicio del Capital?
Alessandro Roncaglia es Profesor de Economía en el Departamento de Ciencias Económicas de la Universidad de Roma, autor de numerosas obras entre las que se destaca La ricchezza delle idee (2001) , libro por el cual recibió el premio Jérome Adolphe Blanqui 2003 de parte de la Sociedad Europea para la Historia del Pensamiento Económico.
Su libro The Wealth of Ideas. A History of Economic Thought, ISBN 13 978-0-521-84337-9 , hardback , (Cambridge University Press, 2005) es una obra monumental de 582 páginas que contienen 18 capítulos imperdibles desde el punto de vista del lector interesado para conocer el rumbo del mundo global y que comienzan con estas frases:
“La idea que sustenta a este trabajo es que la historia del pensamiento económico es esencial para comprender la economía, que constituye un aspecto central de las sociedades humanas”.
“Comprender a los Otros: este es el objetivo del historiador. No es fácil tener una tarea mas difícil. Es dificultoso tener una más interesante” (Kula 1958, p. 234)
“El nacimiento de la economía política no tiene lugar en un momento preciso”.
“Sir William Petty nació el 26 de Mayo de 1623 en el año 20 del reinado de James I, en la villa de Romsey, Hampshire (England) y murió el 26 de Diciembre de 1687 en Londres”.
“En el siglo que transcurre entre los escritos de William Petty y Adam Smith el pensamiento económico se dirige hacia muchas direcciones”.
“Adam Smith nació en la pequeña Kirkaldy (1500 habitantes en ese tiempo) en la costa este de Escocia, en 1723”.
“La inglesa ‘Gloriosa Revolución’ de 1688 tuvo lugar, prácticamente, sin derramamiento de sangre, y a pesar de cambiar radicalmente el orden político no produjo ninguna ruptura en la continuidad de las instituciones inglesas”.
“David Ricardo nació en Londres en 1772”.
“Todavía admirada por su estructura clara, lógica, la construcción teórica de Ricardo constituye la referencia esencial para cualquiera que encare los problemas económicos después de la publicación de los Principios”.
“La estructura analítica basada en la noción de plusvalía y la representación del sistema económico como un flujo circular de producción y consumo, desarrollado por los economistas clásicos, y en particular por Ricardo, fue tomado y utilizado de un modo original por Karl Marx (1818-83)”.
“El término “revolución marginalista” es usado comúnmente utilizado para indicar un cambio imprevisto de dirección en la ciencia económica, con el abandono del enfoque clásico – y más precisamente, Ricardiano – y el surgimiento de un nuevo enfoque basado en la teoría subjetiva del valor y la noción analítica de la utilidad marginal”.
“El fundador de la “escuela austríaca” nació en Polonia, parte del Imperio Austro-húngaro en 1840”.
“Entre los economistas contemporáneos esta difundida la idea que afirma que la teoría del equilibrio económico general debe ser identificada como una teoría simple, indivisible, que debe ser tomada como medida por la cual cualquier otra teoría debe ser tomada como un caso particular”.
Los títulos de cada uno de los capítulos son: “The History of economic thought and its role”, “The prehistory of political economy”, “William Petty and the origins of political economy”, “From body politic to economic tables”, “Adam Smith”, “Economic science at the time of the French Revolution”, “David Ricardo”, “The ‘Ricardians’ and the decline of Ricardianism”, “Karl Marx”, “The marginalist revolution: the subjetive theory of value”, “The Austrian school and its neighbourhood”, “General economic equilibrium”, “Alfred Marshall”, “John Maynard Keynes”, entre otros.
El Gral. Perón, en una de las 20 Verdades del Peronismo, afirma que “el capital debe estar al servicio de la economía y que esta debe estar al servicio del bienestar social”.
¿Es posible crear un universalismo justo sin bienestar social para todos los seres humanos?
¿Esta la llamada “ciencia económica” al servicio del bienestar social de la humanidad?
Este libro nos mostrará - brillantemente - como el camino del infierno esta plagado de buenas intenciones.

Guillermo Compte Cathcart

Monday, March 27, 2006

La Temprana Edad Media: ¿El Orígen de la Globalización?

Framing the Early Middle Ages. Europe and the Mediterranean, 400 – 800, de Chris Wickman, Oxford University Press, 2005, ISBN 0-19-926449-X, de 990 páginas es un libro impresionante pues nos muestra, región por región, los cambios producidos inmediatamente después de la caída del Imperio Romano, o mejor dicho , de la caída de Roma.
El autor nos ofrece una nueva forma de encarar tema tan discutido como el de la Caída del Imperio Romano, analizando los grandes temas, los clásicos temas, desde el punto de las historias regionales desde Egipto hasta Dinamarca: Geografía y Política, Estructura del Poder Aristocrático, Campesinado, Redes, Ciudades, Sistemas de Intercambios, la Construcción de los Estados y sus formas, control y tenencia de las tierras, los campesinos y las villas y sus sociedades.
En la página 11 leemos:
“el concepto de continuidad esta muy mal usado, pues se recorta el cambio social privilegiando cosas particulares. La gente que lo invoca usa a menudo señala la técnica romano británica de construcción de muros en las casas anglosajonas, la accesibilidad de manuscritos de Ovidio en los monasterios francos, la perdurabilidad y longevidad de una dinastía gobernante en la frontera cristiano-musulmana en España, la cuadrada disposición de las calles en una ciudad carolingia de Italia, la posibilidad de usar papiros egipcios en Occidente, la existencia de un título senatorial en la Bizancio del 800, la continuidad de los límites en la Palestina Romana y la Árabe...”.
El autor, sagazmente, indica que el cambio social , el tránsito entre el Imperio y el Post- Imperio asume un ritmo distinto según las regiones, es decir, privilegia lo local como sede del tránsito hacia el mundo moderno.
Algo así como la guerra entre las regiones para anidar al Imperio Renacido.
En la página 371 leemos:
“Los lugares centrales y sus gobernantes no tenían un exclusivo monopolio sobre las importaciones a pesar de controlar las explotaciones de sus propiedades, pero tal control no era rígido y eficiente. Las villas eran razonablemente prósperas, y habitadas por campesinos independientes, con sus propios esclavos, sin que exista evidencia de estar su producción bajo el dominio de una dirección “feudal”. Las élites eran estables, pero a todo nivel se encuentran signos de autonomía, más que de control, tal como en las tribus del orígen de Inglaterra, Gales e Irlanda. Todas estas son proposiciones muy hipotéticas, inevitables cuando uno inventa historia social fuera de los modelos puramente arqueológicos”.
En una región las villas comienzan a desaparecer y se van congregando en ciudades, en otros lugares las villas se fortalecen, es como si el mapa que rodea al mundo mediterráneo fuera algo palpitante, con erupciones y enterramientos.
Este libro excelente nos da la posibilidad de imaginar cual será el futuro de la actual globalización en cuanto lo local, nutrido por las raíces de la identidad sea capaz de asumir la responsabilidad de construir el Nuevo Imperio que elige , como siempre, las manos y el corazón de quienes se arriesgan a fijar sus reglas al Universo y no se someten mansamente a lo que la Naturaleza o los Otros dictaminan.
Si el Imperialismo de la Justicia Social no se impone, seguiremos padeciendo el mal Imperio de la Inequidad.

Guillermo Compte Cathcart
¿Caída o Transformación del Imperio Romano?
“Escribir un libro es un cuidadoso balance entre el emprendimiento individual y la ayuda colectiva”.
Esta hermosa frase solo puede ser dicha por quien forma parte de una sociedad en la cual el libro es el resultado previsible de una poderosa industria cultural, el producto de un aceitado mecanismo que protege y aumenta las capacidades personales, es – ni más ni menos – uno de los frutos benditos de una comunidad organizada.
La Comunidad Académica del Atlántico Norte, el Mare Nostrum Anglosajón, suele darse esos lujos tan lejanos para nosotros, las colonias invisibles, el llamado “Imperio Informal Británico” , que tanto y tan bien han descrito los historiadores del Imperio cuyas posesiones se pintaban de rojo en el mapa terrestre.
Julia M. H. Smith es especialista en género, religión y política en la temprana edad media europea. Enseñó en la University of Glasgow, en los Estados Unidos de Norteamérica y en la University of St. Andrews. Es miembro de la Royal Historical Society y desde hace poco del Netherlands Institute for Advanced Studies y del Shelby Cullom Davis Center en la Princeton University.
Ella ha escrito un libro excelente Europe After Rome. A New Cultural History 500-1000, publicado por la Oxford University Press, 2005, ISBN 0-19-924427-8.
http://www.oup.co.uk/

Luego de una sugestiva y punzante “Introducción” la autora nos lleva de la mano para recorrer los capítulos de esta obra imprescindible para comprender como el Imperio Romano se transformó en el triunfante Imperio Británico, como la Pax Romana devino en Pax Británica.
“Hablando y Escribiendo” (La Torre de Babel, Lenguajes de Autoridad, Alfabetizaciones Locales y Elites Alfabetas), “Viviendo y Muriendo” (Vivienda, Nacimiento y Muerte y Respuestas a las Calamidades), “Amigos y Relaciones” (Identidad, Amigos por Sangre, Honor y Venganza), “Hombres y Mujeres” (Diferencias de Género, Los Apareamientos de Concepción, Mujeres, Familia y Herencia), “Trabajo y Señorío” (Libertad y Servidumbre, Campesinos y Señores, En Busca de Status) y otros más nos darán un exacto panorama de la vida de esas comunidades tan lejanas y hoy tan parecidas a las nuestras – gracias a la globalización – que ha hecho de nosotros siervos de un mundo que maldice a los malos reyes y bendice a los buenos.
Para terminar esta breve referencia a tan bello libro de la Oxford University Press traduzco un poema impreso en la página 268, dedicado a Carlomagno:
“Carlos, guerrero poderoso, vencedor misericordioso y rey triunfante/ superas en bondad a todos los reyes en el mundo/ más justo y más poderoso que todos ellos....Rey Carlos, cabeza del mundo, amor y adorno de tu pueblo/ venerable cúspide de Europa, el mejor padre, héroe/ augusto señor en una ciudad donde una nueva Roma florece/ alcanzando las grandes alturas con sus murallas macizas/ tocando las estrellas con sus grandes domos”.
Este poema fue compuesto aproximadamente en el año 799, cuando nacía el siglo IX a poco más de cuatro siglos de la caída de Roma.
Los cortesanos de Carlomagno no dudaban que formaban parte de la Roma Renacida, la Roma transformada. Sin embargo, hay todavía ingenuos que creen que los Imperios se derrumban definitivamente, porque no conocen la famosa ley de aquél francés cuyo apellido era tan difícil de pronunciar bien en el secundario: “Nada se pierde todo se transforma”.
Son los mismos que eluden la responsabilidad de la liberación creando utopías o maldicen al Imperialismo de la Pax Americana y van a veranear a Miami o a aplaudir una obra en Broadway.
http://www.rsc.org.uk/cymbeline/teachers/reality.html


Guillermo Compte Cathcart
Poder Naval e Imperio

La Oxford History of the British Empire, es una colección imprescindible para comprender el nacimiento, el desarrollo y el estado actual de la “fase superior del imperio Romano y de los cimientos del imperio americano”. O del tránsito , o evolución, de la Pax Romana a la Pax Británnica y de esta a la Pax Americana.
http://en.wikipedia.org/wiki/Pax_Britannica
http://www.oup.co.uk/

The Eighteenth Century editado por P.J. Marshall, ISBN 0-19-924677-7 (V.2), paperback (Oxford University Press, 1998) es un libro formidable por la cantidad y calidad de ensayos que ofrece al lector y al investigador interesado en el cómo se afirmó el Imperio Británico en el globo terráqueo y en los mapas pintados de rojo en sus dominios ultramarinos.
El Capitán Cook, el General Wolfe y Clive de la India, les prestan sus nombres a los miles de británicos que bajo la Union Jack , a fuerza de espadas y cañonazos, conquistaron el mundo y lo sometieron a la voluntad de la monarquía constitucional que tanto envidiaron – y envidian – millones de “copiadores” a lo largo y a lo ancho del planeta.
http://www.geocities.com/TheTropics/7557/
http://www.hunterian.gla.ac.uk/museum/cook/cook.html
http://www.captaincooksociety.com/
http://www.plpsd.mb.ca/amhs/history/wolfe.html
http://www.geocities.com/Athens/Academy/3967/wolfe.html
http://www.imdb.com/title/tt0026221/
http://www.historyofwar.org/articles/people_cliveofindia.html
Una importante lista de mapas, de tablas, y de figuras, mas el aporte de una exhaustiva cronología, favorecen el análisis y la interpretación de la proto-globalización que nació cuando murió la Reina de Acero, Isabel I.
Los ensayos son:
Introduction de P.J. Marshall; British Diaspora: Emigration from Britain, 1680-1815 de James Horn; Inseparable Connections: Trade, Economy, Fiscal State, and the Expansion of Empire, 1688-1815 de Patrick K. O’Brien; The Imperial Economy, 1700-1776 de Jacob M. Price; The Anointed, the Appointed, and the Elected: Governance of the British Empire, 1689-1784 de Ian K. Steele; Religious Faith and Commercial Empire de Boyd Stanley Schlenter; Colonial Wars and Imperial Instability, 1688-1793 de N.A.M. Rodger; World-Wide War and British Expansion, 1793-1815 de Michael Duffy; Empire and Identity from the Glorious Revolution to the American Revolution de Jack P. Greene; Knowledge and Empire de Richard Drayton; “This famous island set in a Virginian sea”: Ireland in the British Empire, 1690-1801 de Thomas Bartlett; Growth and Mastery: British North America, 1690-1748 de Richard R. Johnson y 13 ensayos mas cuyos títulos y autores pueden consultar enviándonos un mensaje a radiogutenberg@yahoo.com
Sea-Power and Empire, 1688-1793 de N.A.M. Rodger es un gran auxiliar para quienes creemos que el desarrollo de las marinas mercante y de guerra son un índice incuestionable para medir las intenciones independentistas de las repúblicas hispanoamericanas que surgieron a comienzos del siglo diecinueve.
Para comprender el enfoque del autor sobre tan importante tema, citamos la bibliografìa selecta que recomienda a los lectores:
Daniel A. Baugh, “Great Britain’s ‘Blue-Water’ Policy, 1689-1815”, International History Review, X (1988), pp. 33-58.
-----“Maritime Strength and Atlantic Commerce: The uses of a ‘Grand Marine Empire’, in Lawrence Stone, ed., An Imperial State at War: Britain from 1689 to 1815 (London, 1994), pp. 185-223.
----- “Why did Britain Lose Command of the Sea during the War for America”, in Jeremy Black and Philip Woodfine, eds., The British Navy and the Use of Naval Power (Leicester, 1988), pp. 149-169.
Y , además, artículos y libros de Jeremy Black, Julian S. Corbett, Michael Duffy, Azar Gat, James Goldrick, John B. Hattendorf y Donald M. Schurman, entre otros distinguidos investigadores.
Las tres últimas frases del ensayo nos muestra hasta que punto fue importante para los británicos la defensa de su territorio, usando el poder naval:
“Grandes expediciones navegaron hacia aguas distantes para atacar y conquistar colonias enemigas pero las flotas principales no fueron con ellas. Ellas permanecían en las Cercanías Occidentales donde los astilleros estaban a la mano para mantenerlas y donde ellas pudieran controlarse eficazmente sobre la base de la inteligencia reciente. Aquí ellas podrían dominar a los únicos enemigos que importaban; desde el comando de estas aguas, derivó el dominio del mundo.
http://www.britishseapower.co.uk/
Por eso, los barcos de San Martín en el Perú eran de muchísima importancia para la real independencia americana.
Pero esa es otra historia...

Guillermo Compte Cathcart

Un libro especial para los irlandeses

Un libro especial para los irlandeses

Tengo en mis manos un libro impresionante: 1219 páginas de historias y aventuras que transcurren desde el primer asentamiento humano antes del 7000 AC hasta la invasión anglo-normanda, un volumen inigualable que contiene 12 mapas, 50 ilustraciones y más de 150 fotografìas que brindan al lector un exhaustivo acercamiento a la Isla que tanto ha hecho para la cultura argentina, a través de los cientos de miles de nativos de estas tierras que tenemos antepasados nacidos en las costas del Mar de Irlanda, el Mediterráneo Verde.
http://www.poirishsea.com/
http://en.wikipedia.org/wiki/Irish_Sea
http://www.merseyshipping.co.uk/
http://www.jncc.gov.uk/page-1541
Particularmente notables son dos de los 27 capítulos que integran esta obra de la Oxford University Press: A New History of Ireland. Prehistoric and Early Ireland, editada por Dáibhí Ó Cróinin, ISBN 0-19-821737-4,
http://www.oup.co.uk/
(Oxford University Press, 2005):
El capítulo XXIV, “Ireland Before the Battle of Clontarf” y el XXV, “Ireland and Her Neighbours” , ambos de F. J. Byrne, profesor emérito del University College, de Dublin, nos cuentan que en el otoño del año 913, una flota de hambrientos vikingos arrivaron a Munster y que la “Anglo-Saxon Chronicle” nos cuenta que ellos llegaron desde la Bretaña francesa a través del canal de Bristol a comienzos del año y que asolaron la costa de Gales y que capturaron a Cyfeiliog, obispo de Archenfield, quien fue rescatado por el Rey Edward por 40 libras de plata y finalmente se establecieron en la isla de Steepholm, en la costa sur de Gales, desde donde se trasladaron a Dyfed e Irlanda. Ellos fueron liderados por dos guerreros de rango superior, sólo superados por un rey, Hroald y Ottar, y su posterior llegada a Bretaña es mencionada brevemente en los anales galeses. El hermano de ambos fue matado por los ingleses, pero los anales Irlandeses se ocupan de la historia de Ottar.
http://www.ucd.ie/

Que la flota vikinga llegó desde Francia es un dato significativo. Pues, así como los ataques vikingos redujeron la influencia francesa – carolingia – sobre los británicos, la concesión de tierras en lo que se denominaría Normandía a Rollo y sus guerreros por parte del rey francés Luis el Piadoso hizo desplazar el flagelo nórdico sobre los reinos británicos pues los normandos iban expulsando a la gran mayoría de los hermanos que venían del norte.
El mismo Byrne, en otro ensayo de este libro que es tan imperioso como el Día de San Patricio
http://www.historychannel.com/exhibits/stpatricksday/
http://wilstar.com/holidays/patrick.htm

para quienes suelen rendir tributo a sus ancestros, “The Viking Age” nos dice:
“Los monjes que escribieron los anales irlandeses no eran clérigos enclaustrados tímidos desconocedores de las realidades del mundo externo. Contrariamente al cuadro pintado por demasiados historiadores modernos, las noticias de los ataques vikingos en los anales irlandeses no están coloreadas por cualquier susto indebido o retórica. Ellas son, bastante fríamente, hechos ciertos. No se exageran las figuras que ellos dan, y así, cuando un acto de atrocidad particular se relata, nosotros podemos tener un poco de confianza en su historicidad. Nada en las fuentes irlandesas contemporáneas iguala la ferocidad de la evidencia literaria nórdica, alguna de las cuales, esto es olvidado a menudo, fue compuesta en el período vikingo por poetas que no dominaban la lectura y la escritura. Un escepticismo saludable acerca de la historicidad absoluta de las sagas islandesas
y otras fuentes Nórdicas medievales, combinado quizás con el hecho que más reciente trabajo sobre los vikingos ha sido dominado por la evidencia arqueológica,
ha llevado a un abandono de la evidencia poética (de los skalds) y del material rúnico que demuestra la tontería de considerar a los escandinavos como totalmente analfabetos”.
Para terminar, y como corresponde a quienes amamos leer un libro como Indexnautas, como viajeros del Index, recomendamos seguir las entradas que corresponden a “Lindisfarne Gospels” 512, 525, 698, 699; dating, 526; use of compas, 686 (citado en la página 1188).
Abrimos el libro en la página 512 y encontramos:
“El Reverendo Charles O’Connor en 1814 respondió con una lista de manuscritos irlandeses que incluyen los Evangelios de Lindisfarne, y todavía hoy esas escrituras son un campo de batalla”. (La frase se refiere a la discusión sobre el uso de la mayúscula, la minúscula y la cursiva en el latín y las peculiaridades regionales que determinaban variaciones en esa lengua clásica).
En la página 525, hallamos:
“Una muy formalizada, para no decir imitativa, versión de esa mayúscula aparece en los Evangelios de Lisdisfarne, los cuales son atribuidos por un colofón del siglo diez a Eadfrith, obispo de Lindisfarne (muerto en el 721)”.
Para averiguar qué nos dicen las otras entradas en el Index, debemos conseguir el libro.
Cuando los normandos llegaron a Irlanda en 1169 no sabían que iba a existir un libro tan completo como este para contar la Historia de la Isla Esmeralda.
Nosotros sí lo sabemos y también dónde encontrarlo.

Guillermo Compte Cathcart